¿POR QUÉ TU PERRO LLORA CUANDO TE VAS?

Todos pasamos por ese momento al salir de casa en el que vemos la carita de nuestro compañero peludo diciéndonos “quédate”, pero desafortunadamente no siempre podemos estar acompañándolo. No obstante, hay animales que sufren cuando sus dueños se van y eso puede derivar en problemas más serios. Si alguna vez te has preguntado por qué llora tu perro cuando te vas o cómo evitar que llore, sigue leyendo.

¿QUÉ SIENTEN LOS PERROS CUANDO TE VAS DE CASA?

Los perros son animales muy sociables y que, por naturaleza, viven en manada (nosotros somos su nueva manada), por lo que irremediablemente se sentirán tristes cuando saben que te vas a ir y se van a quedar solos durante un tiempo.

Además, son animales muy inteligentes que aprenden tus rutinas y son capaces de saber que te vas a ir antes de que te acerques a la puerta.

Pero, aunque todos se sientan tristes al ver que su persona favorita se va de casa, no todos lloran o aúllan. Muchos peludos saben gestionar sus emociones, tanto positivas como negativas, logrando así superar su miedo o ansiedad al quedarse solos.

Sencillamente, saben que sus dueños van a volver a casa en unas horas y aprovechan ese tiempo en el que están solos para jugar, dormir, mirar por la ventana, etc.

Además, siempre es bueno tener sus juguetes favoritos cerca, así se sentirán estimulados durante todo ese tiempo.

Al fin y al cabo, para conseguir que el animal tenga equilibrio emocional tiene que confiar en su dueño y en el vínculo que los une, y saber que siempre va a volver a casa.

RAZONES POR LAS QUE LOS PERROS LLORAN CUANDO ESTÁN SOLOS

Algunas veces se debe a malos hábitos que, aunque bienintencionados, les inculcan sus dueños. Es normal que si tienes un vínculo con tu compañero peludo quieras darle el mayor bienestar posible y que no sienta ninguna emoción negativa, pero la sobreprotección y el apego excesivo no son beneficiosos para el animal. En estos casos, el peludo no sabe gestionar sus emociones ante el tiempo en el que se encuentra solo en casa, y tenderá a desarrollar ciertas conductas como ladrar y gemir durante horas, rasguñar o morder muebles, lo que su vez le causará estrés y ansiedad.

En otros casos, se debe a experiencias traumáticas anteriores, como el abandono o maltrato por parte de sus anteriores “dueños”. Ante estas situaciones, el animal puede sentirse inseguros y pensar que han vuelto a abandonarlo, y ese miedo a estar solos de nuevo les hace sentirse nerviosos y estresados. Por ello, necesitarán mucha paciencia y aprendizaje para poder gestionar sus emociones y saber que siempre volverás con él.

Además, si el animal tiene una rutina sedentaria en la que no se le estimule lo suficiente es muy probable que adopte comportamientos como ladrar o destruir objetos debido al aburrimiento y a la soledad que sienten.

PROBLEMAS A LARGO PLAZO

A nadie le sienta bien vivir en constante tensión, miedo y estrés durante tantas horas todos los días de la semana, y a tu peludo tampoco.

Si la situación continúa y se agrava, el animal puede sufrir trastornos relacionados con la separación, que pueden derivar en conductas destructivas para aliviar el estrés. Incluso el animal podría desarrollar estereotipias, movimientos repetitivos realizados de forma compulsiva y obsesiva que pueden provocar que se haga daño.

¿CÓMO EVITAR QUE LLORE?

El perro debe aprender a gestionar positivamente sus emociones, sentirse más seguro y mejorar su autoestima. A continuación, te mostramos algunos consejos:

Enriquece el ambiente y estimúlalo con juguetes interactivos y otros accesorios pensados para que el animal se ejercite y trabaje su inteligencia.

Proporciónale un espacio cómodo y seguro destinado solo para él, así sentirá seguridad cuando se quede solo. Así, tendrá un refugio al que acudir si se siente mal y donde podrá sentirse seguro.

-Ejercítalo antes de irte, ya que, como comentamos anteriormente, los perros que tienen una rutina sedentaria son más propensos a presentar ansiedad y aburrimiento cuando se quedan solos. Además, si se cansa se echará una siesta para coger energía para el próximo paseo y el tiempo pasará más rápido.

Pon música, así no se encontrará en un entorno totalmente silencioso, y le dará la sensación de que no está solo.

Prueba a irte unos minutos y después vuelve, y así sucesivamente hasta que poco a poco se vaya acostumbrando y se haga a la idea de que aunque se quede solo unas horas al día siempre vas a volver con él.

0
    0
    Carrito